La puesta de largo de la gigafactoría de baterías de Volkswagen, a cargo de su filial SEAT, reunió a más de 250 empresas y sectores en la sede de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) en València. Hasta la ciudad del Turia se desplazó una representación de la Asociación de Empresarios de la Foia de Castalla con el fin de conocer de primera mano las líneas maestras que plantea la multinacional alemana para el futuro de su apuesta en la Comunitat.
El vicepresidente ejecutivo de Compras de SEAT, Alfonso Sancha, fue el encargado de exponer el plan en el nutrido auditorio de CEV. La gran apuesta del grupo automovilístico por Parc Sagunt para poner en marcha su planta de baterías supondrá una inversión de 4.000 millones y compras anuales por valor de 8.000 millones.
La compañía quiere que se queden en el territorio para generar una cadena de valor resiliente y asegurar la competitividad de España. “Solamente podremos tener una fábrica de coches eléctricos en España si contamos con una red de proveedores fuertes en el segmento del coche eléctrico y sus componentes”, avisó el vicepresidente ejecutivo de Compras de SEAT, Alfonso Sancha.
La firma buscará partners con los que establecer alianzas de la Comunitat Valenciana. En este escenario es importante que las empresas de la Foia de Castalla estén bien posicionadas para establecer sinergias porque ya han demostrado que están capacitadas para trabajar con las grandes de la automoción y con sus Tier 1 y Tier 2.
Volkswagen aspira a construir la fábrica de baterías más grande del grupo en Europa, un hecho que el músculo empresarial de Foia de Castalla debe aprovechar por su cercanía, experiencia y las capacidades productivas que posee el tejido de nuestro territorio. “Queremos ser una parte integral de la Comunitat y no alguien que simplemente viene de paso. Estamos aquí para quedarnos”, indicó Sancha.
Las previsiones que expuso Alfonso Sancha son que la fábrica empiece a funcionar en 2026 y genere más de 3.000 puestos de empleo. A los asistentes se les detalló cómo pueden presentar sus propuestas de negocios para canalizar así las alianzas y ser proveedores de la multinacional alemana. Alfonso Sancha fue directo: “Vamos abrir la puerta, van a tener que atravesarla ustedes y mostrar su buen hacer y competitividad”, apostilló.
Con una capacidad de producción de 40 gigavatios hora, que equivale al suministro de 800.000 vehículos eléctricos anuales, la gigafactoría fabricará celdas unificadas de un mismo tamaño para todos los vehículos del grupo empresarial. Volkswagen es la firma que engloba a marcas como Skoda, SEAT y Cupra, entre otras. Las celdas se fabricarán con cobalto y MNC, aunque la planta de Sagunt busca ser polivalente adaptarse a las tecnologías químicas que surjan en el futuro.
Una de las cuestiones que subrayó Sancha es que en septiembre habrá una resolución sobre el PERTE (un proyecto basado en la colaboración público-privada y centrado en el fortalecimiento de las cadenas de valor de la industria de automoción español, un sector estratégico para España). A finales de ese mes tendría que estar la resolución definitiva del otorgamiento de los fondos europeos para acelerar en la puesta en marcha de la gigafactoría.
CEV
Salvador Navarro, presidente de CEV –organización empresarial a la que pertenece IBIAE– declaró que “nuestra situación geoestratégica, la diversificación productiva, la apertura al exterior o nuestras excelentes infraestructuras han convencido a Volkswagen, y ahora tenemos la enorme responsabilidad de no defraudarles”. En este sentido, el presidente de CEV, como organización más representativa de la Comunitat Valenciana y con un peso importante en la CEOE, apuntó que se implicará “al 100% en apoyar las necesidades de SEAT y de los sectores implicados en esta inversión “para que tengan el mejor ecosistema de proveedores posible”.